El pasado mes de junio falleció Koko Taylor, la indiscutible, para muchos, reina del blues. Nacida como Cora Walton (Memphis, 1928) en un entorno de extrema pobreza y huérfana junto con sus cinco hermanos desde los 11 años, Koko pronto empezó a mostrar sus grandes dotes musicales. A pesar de las influencias del gospel, ella siempre se decantó por el blues que escuchaba en las emisoras de radio de Tennesse, por sus admirados Bessie Smith, Memphis Minnie y también Muddy Waters, Howlin’ Wolf y Sonny Boy Williamson. Con poco más de 20 años, "35 centavos y un paquete de galletas de arroz" se mudó a Chicago, como tantos otros afroamericanos huyendo de la miseria y la segregación racial de los estados del sur.
Alternando su trabajo como limpiadora en las casas de los barrios ricos del norte de la ciudad, Koko frecuenta los clubes de blues en los que empieza a cantar acompañando a los grandes artistas de la época. Tras una de sus actuaciones, Willie Dixon se fija en ella y le consigue un contrato para la Chess Records. A partir de aquí comienza una carrera excepcional, rebosante de talento y de personalidad, de fuerza y de sensibilidad.
Koko Taylor nos dejó en junio pero seguimos teniendo su blues, eso nadie nos lo podrá quitar. Más info aquí
Koko Taylor - Wang Dang Doodle
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